SEAT: las siete décadas del fabricante español

La Sociedad Española de Automóviles de Turismo, más conocida como SEAT, fue fundada el 9 de mayo de 1950. Con aportes del Instituto Nacional de Industria, de algunos bancos y de Fiat, la naciente marca presenta su primer modelo en 1953, el sedán 1400, ejemplar que junto al menudo 600 permitió poner a “España sobre ruedas”.

Está claro que SEAT es por derecho propio la gran marca automotriz de España, tomando en cuenta que es la más influyente de la escena actual; nombres como Tramontana, Spania GTA y Hurtan no le hacen sombra. Pero la firma de Martorell no es la de más antigua data de esa nación, porque entre 1898 y 1902 el fabricante La Cuadra tuvo la responsabilidad de representar a la industria española cuando la automoción mundial daba sus primeros pasos.

Tres años más tarde de haberse constituido la sociedad, el 5 de junio de 1953 comenzaron a operar las recién inauguradas instalaciones de la Zona Franca de Barcelona, iniciativa que facilitó el nacimiento del primer automóvil firmado por SEAT, el sedán 1400 que no era más que un modelo Fiat fabricado bajo licencia. Pese a eso los españoles vieron al 1400 como uno de los suyos, lo que por supuesto ayudó a que el citado producto se vendiera muy bien desde el primer momento; casi 100.000 unidades se produjeron en un periodo de 11 años.

A TRAVÉS DE SU HISTORIA SEAT HA DESARROLLADO ALGUNOS EJEMPLARES DESTINADOS A IMPRESIONAR AL PÚBLICO, MÁS QUE AUMENTAR LAS VENTAS. ENTRE ELLOS UNA VARIANTE CABRIOLET DEL IBIZA, JUVENIL SILUETA QUE SE PRESENTÓ EN 1986 Y QUE LUEGO FUE REEDITADA EN 1989 BAJO LA TUTELA DE GIUGIARO. NUNCA PASÓ DE SER UN PROTOTIPO.

Pero uno de los hitos más importantes de la marca, desde su fundación claro está, se registró el 27 de junio de 1957 cuando se estrena uno de los automóviles más célebres de la compañía, el 600, otro ejemplar de la familia Fiat que al fabricarse en España y exhibir el escudo de SEAT se transformó en un éxito de ventas en la tierra de la zarzuela.

El SEAT 600 puso literalmente a “España sobre ruedas”, porque se trataba de un automóvil de bajo costo y muy fácil de mantener, y como la producción demandaba poco tiempo en cosa de meses esos pequeños automóviles inundaron las calles, prestándole de paso un valioso servicio a miles de usuarios. El 600 se mantuvo en producción durante 16 años, superando por amplio margen al 1400, y en los registros históricos de la marca se señalan casi 800.000 unidades fabricadas.

Sobre la base del compacto 600 surgió un extraño ejemplar, un producto que llenaría el vacío existente entre el 600 y el 1400. Se trataba de un 600 equipado con cuatro puertas, para lo cual la plataforma se extendió 180 mm, lo que obligó a modificar el techo, mientras que en los flancos se ubicaron unas puertas traseras que abrían hacia adelante, y no hacia atrás como en el caso de los accesos frontales.

El prototipo le fue encargado a Carrocerías Costa, un pequeño fabricante experto en la realización de proyectos especiales. El debut del SEAT 800, nombre que además de las cuatro puertas aludía al nuevo motor de 767 cc, debutó en la Feria Internacional de Barcelona de 1963, recibiendo excelentes comentarios por parte del público. La producción en serie inició ese mismo año, manteniéndose hasta 1967, cuando la marca decidió retirarlo del catálogo para darle cabida al hatchback 850.

El Fiat 800 registra una producción total de 18.200 unidades, pocas en realidad, debido a lo lento y complicado que era el proceso de transformar las carrocerías del 600 al nuevo formato, trabajo que no asumió directamente la marca y que fue abordado por Carrocerías Costa; era una conversión casi artesanal.

Una historia en desarrollo

En la década de los sesenta el avance de la marca ya era imparable, tanto así que en 1965 el nombre de SEAT comienza a oírse en otros rincones del mundo, en Colombia para ser más precisos, mercado que se transforma en el primer punto de exportación para el modelo 600. Y en 1968 desde la fábrica egresa la unidad 1.000.000, un importante logro que confirma el buen trabajo que hasta ese momento está realizando la compañía; iniciando los setentas SEAT se apunta como la empresa más grande de España, y en ese mismo periodo se inicia su participación en el mundo del deporte motor.

El Centro Técnico de Martorell se inaugura en 1975, lo que brinda el entorno adecuado para que la marca realice sus propios desarrollos, para dejar –en parte al menos- la dependencia de Fiat. Se devela el 133, el primer diseño realizado por SEAT, lanzamiento al que le siguen los ejemplares 127, 128 y Ritmo, todos ellos ajustados al antiguo acuerdo suscrito con la firma italiana.

A inicios de los ochentas, una década decisiva en muchos aspectos, SEAT y Fiat dan por finalizado su acuerdo de colaboración y desde ese minuto la casa española se siente en plena libertad por primera vez en su historia. Pero su soltería duró poco, porque el 30 de septiembre de 1982 entra al juego el constructor alemán Volkswagen, alianza que dos años más tarde dio sus primeros frutos, cuando en abril de 1984 se presenta el Ibiza… uno de los mayores íconos de la marca.

La denominación de los modelos debió reemplazarse, relegando al baúl de los recuerdos los apelativos heredados de Fiat para utilizar nombres de ciudades españolas, como el mentado Ibiza, además de Málaga y Marbella, entre otros. En 1989 comienza a operar la fábrica de Martorell, instalaciones que hasta ese momento solo albergaban al Centro Técnico y a inicios de los noventa el paquete accionario de SEAT pasa casi en su totalidad a las manos del Grupo Volkswagen, lo que por supuesto modifica las bases económicas y el futuro de la compañía.

El Toledo es el primer automóvil desarrollado dentro de la nueva estructura, un ejemplar que debutó en 1991 y que fue bienvenido en el mercado local. Al poco tiempo se agregaron el Córdoba y un renovado Ibiza, y en 1996 llega el primer integrante de la familia Cupra, el Ibiza Cupra, cerrando ese decenio con el estreno del SEAT León.

De ahí en adelante se comienza a escribir una historia reciente, de una compañía que en la actualidad exporta el 81% de su producción anual y que participa en más de 75 mercados, actividad que genera más de 100.000 empleos directos e indirectos.