Renault Clio: un hatchback con raíces mitológicas

Es uno de los modelos icónicos de la firma francesa, un exitoso ejemplar que desde 1990 acumula ventas y premios internacionales. Y ahora la quinta generación llega a nuestro país, de forma tardía pero con una propuesta muy interesante. 

Antes de conocer a esta quinta evolución del Renault Clio, es importante revisar parte de su historia. El mundo vivía la mitad de la década de los ochenta y al fabricante del rombo no le estaba yendo bien, porque tras la descontinuación –y natural desgaste- del modelo 5 la marca se había quedado sin un “caballito de batalla”… sin ese producto de acceso que le permitiera engrosar sus ventas.

El riesgo de bancarrota no era menor, por lo que rápidamente fue designado un nuevo staff directivo, encabezado por Georges Besse, quien lamentablemente fue asesinado en 1986. Tras ese suceso fue nombrado Raymond Lévy como máximo responsable de la compañía, cuya tarea principal era sacarla de los apuros financieros.

La estrategia rindió buenos frutos y Renault logró robustecer sus arcas, estando además en condiciones de volver a ubicarse en los primeros lugares del ranking de ventas europeo. Para lograrlo se le dio forma a un compacto y juvenil hatchback del segmento B, un ejemplar bautizado Clio, nombre que fue tomado de una de las nueve musas de la mitología griega; así Renault abandonaba las denominaciones numéricas.

Por sus cualidades el Clio gustó de inmediato, siendo los compradores jóvenes sus mayores adeptos, quienes lo convirtieron en su estandarte y ensalzaron su diseño fresco y exento de vanidad.

Y así el pequeño Clio asumió un rol de gigante al interior de su marca y del segmento B, obligando a otros constructores a reaccionar e imitar su propuesta. Tras cinco generaciones, con la primera de ellas presentada en 1990, de este modelo se han vendido más de 15 millones de unidades en todo el mundo y en dos oportunidades ha sido distinguido con el premio Auto del Año de Europa.

Ya en el presente, este incombustible ejemplar de Renault está más activo que nunca, aunque por diferentes razones tardó tres años en ingresar la quinta generación a nuestro país. Pero más vale tarde que nunca, y más aun considerando que el siguiente paso será el de la electrificación total del modelo, por lo que afortunadamente no nos quedaremos con las ganas de ver lo que en estricto rigor será el último Clio de la era a combustión.

El Clio V, el que dicho sea de paso fue develado en el Salón de Ginebra de 2019, es un poco más pequeño que su predecesor, presentándose con 4.050 mm de largo, 1.798 mm de ancho, 1.440 mm de alto y con una distancia entre ejes de 2.583 mm; es decir, es 14 mm más corto y 30 mm más bajo.

Por supuesto que el diseño exterior fue modificado, asumiendo los rasgos característicos de los nuevos ejemplares de la marca, como el Arkana por ejemplo, exhibiendo una proa equipada con los faros de ledes C-Shape, junto a una mascarilla en forma de V y con el emblema del rombo en medio de ella; las luces C-Shape se replican en la zaga, y debutan nuevos diseños de llantas bitonalidad (16 y 17”).

En el interior la calidad y la ergonomía subieron de nivel, además de la oferta tecnológica, en este caso incorporándose un clúster digital de 7” en las unidades tope de gama y una pantalla táctil también de 7” que nos brinda acceso a las funciones del teléfono mediante una plataforma denominada Easy Link; es compatible con Android Auto y Apple Car Play.

El importador optó por una solitaria opción de tren motriz, en este caso por un motor turbo gasolinero de tres cilindros, en el que se anuncia un desplazamiento de 1,0 litros y que produce 100 CV a 5.250 rpm y un torque máximo de 160 Nm a 2.750 giros por minuto; lo acompaña una transmisión mecánica de cinco velocidades.

Los niveles de equipamiento son dos, Zen e Intens, ofreciéndose en ambos niveles los siguientes dispositivos orientados a la seguridad: frenos ABS+EFU, control de estabilidad, asistencia de partida en pendiente, seis airbags, anclajes Isofix, sensores traseros, control de crucero, limitador de velocidad, encendido automático de luces y sensor de lluvia. En el acabado Intens se agregan sensores frontales y cámara de retroceso.

El Clio V se fabrica en Turquía y llega a nuestro mercado con precios bonificados de $14.690.000 y $15.690.000, para las versiones ya identificadas. Es probable que más adelante se agregue una nueva versión equipada con caja automática, pero aún no hay fecha para eso.

En las dos fotografías que cierran esta crónica, podemos ver al Clio de primera generación, que como ya lo señalamos fue presentado en 1990, y la deportiva unidad Clio Williams de 1993, hot-hatch equipado con un motor de 2,0 litros del que brotaban 160 caballos… corría a 216 km/h.