Citroën C4: la décima generación asume una nueva fisonomía
Desde 2004 que este modelo está presente en el catálogo de la firma francesa, y en su décima generación se reinventa mediante una silueta que mezcla los atributos de un fastback con los de un crossover.
El fabricante del doble chevrón no esconde su orgullo al hablar del C4, un ejemplar de larga data y cuyo árbol genealógico comenzó a mostrar sus primeros brotes nada menos que en 1928… en ese momento como el reemplazante del exitoso Rosalie 8. Y entre las celebridades que portan este mismo ADN están los afamados AMI 6, GS y BX.
Pero volviendo a una época reciente es importante aclarar que el C4 fue concebido para tomar el lugar del modelo Xsara, una propuesta que fue muy bien recibida en todo el mundo, porque desde que fue lanzado en enero de 1998 el citado ejemplar nunca dejó de sumar unidades en los registros de ventas; ostenta el honor de ser uno de esos tantos best seller de Citroën.
El asunto es que ya está disponible en nuestro país el décimo volumen de esta novela titulada C4, una evolución en la que se anuncia el uso de una nueva plataforma, la base modular CMP, el mismo cimiento que podemos ver en ejemplares tales como el Peugeot 2008 y DS3 Crossback, sus hermanos de grupo industrial; recordemos que PSA fue reemplazado por Stellantis.
Pero más detectable a la vista es el hecho de que la tipología hatchback fue eliminada en su totalidad, para darle espacio a una silueta mucho más cercana a lo que es un crossover, aunque si nos ponemos a hurgar en el baúl de los recuerdos también notaremos que el debutante C4 exhibe las típicas soluciones arquitectónicas de un fastback… esa tipología que hizo de las suyas en los años 80 y en la primera mitad de los 90.
Es una lástima que el C4 ya no considere la variante tres puertas dentro de su line up, desde hace tiempo por cierto, porque vaya que lucían bien esas unidades VTS, las que se caracterizaban por su zaga trunca. Pero bueno, está claro que en estos tiempos la funcionalidad se impone por sobre el estilo, de lo contrario aún estarían las calles colmadas de coupés.
Una vez más regresemos al presente, y ahora para comentarles que el actual C4 es bastante grande. Se anuncia una longitud de 4.360 mm, una anchura de 1.800 mm, una altura de 1.525 mm y una distancia entre ejes de 2.670 mm; el modelo de 2004 medía 4.260 mm de largo así que algo se estiró en estos 17 años.
Estéticamente está perfecto, destacándose esa proa compleja y tecnológica, junto a esas aplicaciones de resina que recorren los pasos de ruedas y los zócalos. Es un look aventurero que no le sienta mal, a pesar de ser un automóvil que prefiere la suavidad del asfalto, y si hablamos de soluciones innovadoras la zaga luce deportiva hasta la saciedad; por su condición de fastback el portalón se alza con luneta incluida, dejando al descubierto un maletero capaz de recibir desde 380 litros.
Desde sus orígenes Citroën se ha preocupado por la comodidad de los ocupantes y el C4 no es la excepción a la regla. Para honrar ese compromiso se incluyen los Amortiguadores Progresivos Hidráulicos, responsables de asegurar un filtrado óptimo de las irregularidades del camino para generar así un efecto de “alfombra voladora”. Y también se incluyen los asientos Advanced Comfort, los que se caracterizan por ofrecer comodidad visual, postural y dinámica a un nivel superlativo.
El confort y la seguridad se ven reforzados por medio de 19 tecnologías de ayuda a la conducción, entre las que se incluye el Highway Driver Assist, dispositivo de conducción semiautónoma de nivel 2, que controla la dirección, aceleración y frenos, así como otras tantas tecnologías orientadas hacia la conectividad; cuenta con una pantalla táctil de 10” que permite acceso a las plataformas Android Auto y Apple CarPlay, y además a las funciones de enlace Bluetooth y Mirror Screen.
Dos opciones de motorización están consideradas para satisfacer a los compradores en nuestro país, ambas alimentadas con combustible de origen fósil… habrá que esperar algunos meses para el arribo de la variante eléctrica, la que sí está presente en los concesionarios europeos.
El primer motor es un Puretech (gasolina) de 1.2 litros que produce 130 CV y 230 Nm de torque, y el segundo bloque es un BlueHDi (diésel) de 1.5 litros que entrega 130 CV y 300 Nm de par, ambos coligados a una transmisión automática EAT8. Serán dos niveles de equipamiento, Feel y Shine, para una gama de cuatro versiones cuya lista de precios parte en $17.990.000; las primeras unidades llegarán durante septiembre como modelo 2022.
Y para concluir esta crónica les dejamos un par de imágenes de antaño, una del C4 hatchback que se presentó en 2004 y otra de esa tan recordada versión de tres puertas, en la que se leían las iniciales VTS.